La piel de naranja no es otra cosa más que la celulitis. En términos médicos, podríamos decir que la piel de naranja es el resultado visible de la acumulación de grasa en los tejidos cutáneos. Suele verse con más facilidad en los muslos, caderas, nalgas y vientre.
¿Cómo reconocer que tengo piel de naranja?
La celulitis es tejido graso acumulado debajo de la piel. La acumulación y retención de grasa hace presión y aflora entre los tejidos cutáneos de la piel. La acumulación de grasa y los pequeños bultos que se forman dan a la piel la misma textura que las naranjas. De ahí que hablemos de piel de naranja.
La piel de naranja afecta a la mayoría de las mujeres siendo una patología del todo habitual. Pero debemos resaltar que los causas pueden ser distintas:
√ Factores genéticos: La acumulación de grasas puede ser una cuestión hereditaria
√ Factores hormonales: Las mujeres tienen más predisposición que los hombres. El embarazo y los trastornos hormonales suelen favorecer la acumulación de grasas.
√ La edad también tiene mucho que ver. Con la adultez, el organismo comienza a ralentizarse y el metabolismo comienza a cambiar.
√ Falta de hábitos saludables: La falta de ejercicios, una mala alimentación, una vida sedentaria, poco consumo de agua y el exceso de alcohol y de tabaco son condicionantes que favorecen la acumulación de grasa.
Tratamientos y forma de combatir la piel de naranja
Al tratarse de grasa acumulada, el ejercicio y la buena alimentación son parte del tratamiento para eliminar la piel de naranja.
Las cremas anticelulíticas y el drenaje linfático manual en las zonas afectas ayudan a relajar la zona favoreciendo la circulación de la grasa acumulada pero no llegan a alcanzar los resultados esperados.
Para mejorar la textura y el aspecto de la piel de naranja te recomendamos:
√ Mesoterapia y tratamientos con drogas lipoliticas: Consiste en la aplicación de inyecciones superficiales con drogas magistrales como ser la L-carnitina, DMAE y cafeína que ayudan a dejar la piel más suave y tersa.
√ Ultracavitación: La emisión ondas de ultrasonido provocan la compresión y descompresión de las células adiposa estimulando la generación de colágeno y la circulación sanguínea en las zonas con celulitis.
Sacá turno y conocé más sobre nuestros tratamientos en medicina estética.