Fotoprotección

La incidencia de cáncer de piel se ha triplicado en los últimos años debido a la exposición solar. Si bien se presenta más frecuentemente en adultos que en niños, la protección solar a edades tempranas de la vida, disminuye el riesgo de melanoma en la edad adulta.

La mayor exposición solar ocurre en las primeras dos décadas de la vida. El daño que produce el sol en la piel tiene memoria, se acumula en el ADN de las células y una vez instalado es irreversible. Es por eso que, crear un hábito en los niños en cuanto al los cuidados del sol, es hacer prevención del cáncer de piel.

Preguntas frecuentes

¿A partir de que edad puede usar protector solar mi bebé?

Las remeras con protección UV, ¿protegen realmente?

Mi hijo/a no se quiere poner protector porque dice que le engrasa la piel, que lo hace transpirar o que le pican los ojos cuando transpira o se moja la cara….y tiene razón… ¿qué alternativa puede usar?

Existen diversos protectores solares con distinta cosmética, que pueden evitar estos problemas. Oil free y antiacné para los que tienen cutis graso, en spray para una colocación más rápida en niños o para distribuir mejor en adolescentes que tienen mucho vello, también hay en disposición protectores solares que aceleran el bronceado protegiendo el ADN celular y protectores con color para reemplazar base de maquillaje. Para cada tipo de piel y cada requerimiento hay un protector específico. No dude en consultar a su dermatólogo cuál es el más apropiado para cada uno.

¿Qué factor se recomienda para que sea efectivo? ¿cómo se coloca?

El factor de protección solar es un número que mide la efectividad para prevenir quemaduras solares. Un factor 30 protege el 96% de los rayos UV, un factor 50 el 98%.

La mejor protección para tu hijo la lograrás:

Usando siempre factores mayores a 30.
Colocando una generosa cantidad 30 min antes de estar expuesto al sol para darle tiempo a que empiece a acutar.
Renovándolo cada 2hs o cada vez que sale del agua.

side-image
Contactanos >